jueves, 6 de septiembre de 2007

Nunca nos fuimos...

Bueno, después de unos meses de paréntesis, donde desgraciadamente el blog ha quedado en segundo lugar vuelvo, porque no dejé nunca de irme, para que aquellas mentes con ganas y tiempo, y que estén dispuestas a leer, puedan tener en este espacio un remanso de paz y compañía.

"- ¡Ay, Dios! ¡Si será posible que he ya hallado lugar que pueda servir de escondida sepultura a la carga pesada deste cuerpo, que tan contra mi voluntad sostengo! Sí será, si la soledad que prometen estas sierras no me miente. ¡Ay, desdichada, y cuán más agradable compañía harán estos riscos y malezas a mi intención, pues me darán lugar para que con quejas comunique mi desgracia al cielo, que no la de ningún hombre humano, pues no hay ninguno en la tierra de quien se pueda esperar consejo en las dudas, alivio en las quejas, ni remedio en los males!"

Capítulo XXVIII 1ª parte.

1 comentario:

Expediente X dijo...

Yo, jamás dudé que te fueras, mi último comentario esperaba esta tan deseada nueva entrada.
"Todas estas razones oyeron y percibieron el cura(Con la Iglesia hemos topado, je, je) y los que con él estaban, y por parecerles, como ello era, que allí junto las decían, se levantaron a buscar el dueño, y no hubieron andado veinte pasos, cuando detrás de un peñasco vieron sentado al pie de un fresno a un mozo vestido como labrador, al cual por tener inclinado el rostro, a causa de que se lavaba los pies en el arroyo que por allí corría, no se le pudieron ver por entonces;"
Bienvenido, querido Pepito Grillo particular, y un saludo de ese que por la red se hace llamar Expediente X, ja,ja. HASTA PRONTO.