jueves, 18 de diciembre de 2008

Momento de valoraciones

Probablemente, para tener un momento y pararse a pensar, cualquier instante es bueno. Sin embargo, en muchos casos tenemos asumida la costumbre de esperar hasta final de año para realizar algunas reflexiones y valoraciones. En el fondo el ser humano es un animal de costumbres, o mejor dicho, de ponerse las cosas muy facilitas, y tener estas fechas para marcar un antes y un después, puede servirle a much@s.

Ha sido un año muy bonito. Duro e intenso. Casi un año de convivencia fuera del hogar familiar (aunque muy cerquita). No se me ocurre otro hecho o motivo más destacable para describir lo que ha sido el año. Es probablemente "lo más, de lo más". En este campo afrontar nuevos retos y enfrentarse a nuevas perspectivas motivará buena parte del 2009 intuyo.

Profesionalmente he aprendido bastante, y aunque me pueda sentir bastante quemado, no puedo negar que he pasado muy buenos momentos. El trabajo ha sido la excusa para salir por primera vez fuera de España, y conocer que los españoles no somos el centro del mundo. ¡Todo un descubrimiento!

Formativamente hablando afronto también retos. Desde hace un par de semanas estoy matriculado en un posgrado de Estadística aplicada a las Ciencias de la Salud. Así mismo, "my poor English" mejora poquito a poco, con paciencia y perseverancia y este próximo 2009 espero que por fin sea el año del inglés para mí.

Las personas que han estado cerca ("cerca", porque cerca tengo muchas personas y seres... indeterminados) me han ayudado a pasar otro año más. Aprendiendo y disfrutando de los pequeños momentos. Soy persona por naturaleza curiosa y quizás el mejor balance del año lo pueda hacer a través de los "descubrimientos" que he hecho, entendiendo por descubrimientos los pequeños detalles, sensaciones y vivencias que he pasado en este 2008 que estamos a puntito de dejar atrás. Espero poder devolver algún día a todas estas personas que tanto me ayudan y reconfortan, una pequeña parte de lo que me aportan.

¿Y el 2009? Es un año de crisis dicen. Creo más bien que es un año de retos, y esto es muy motivador. No puedo empezar la reflexión del año próximo sin recordar que prontito, muy prontito en Enero, junto con mi querida afrontaremos un reto para el que nos hemos estado preparando (bueno, ella sobre todo) durante un año. Espero que tenga toda la suerte del mundo, porque se lo merece, por sus propios méritos y por haberme aguantado estos meses (¡que no es poco!). Me asusta pensar que mi futuro dependa en buena medida de estas próximas semanas...

Espero que llegue por fin el momento "de ir más allá", y sólo deseo "estar en el momento adecuado, en el sitio oportuno", que al fin y al cabo eso es lo que solemos llamar suerte. ¡Qué ustedes lo pasen bien!